Chance Comanche admite asesinato de una mujer con un cable

El exjugador de la NBA continúa siendo investigado por las autoridades de Las Vegas.

Tijuana, 21 de Diciembre. - El basquetbol de Estados Unidos y la NBA, principal organización de ese deporte en ese país, están conmocionados con el escalofriante caso de uno de sus exjugadores que confesó que estranguló a una mujer y la enterró en el desierto cerca de Las Vegas.

Y es que Chance Comanche relató a la policía que asesinó a Marayna Rodgers y la enterró, restos que fueron encontrados por las autoridades.

El exjugador, que prestó sus servicios a Portland Trail Blazers y militó en la NBA G League, se formó en la Universidad de Arizona, jugó en Turquía (Yeni Mamak Spor) y Serbia (Partizán) declaró al departamento de Policía Metropolitana de Las Vegas que él y su exnovia, Sakari Harnden, le ayudaron a asesinar a Rodgers.

El exjugador de la NBA fue arrestado por el FBI en Sacramento (California) y en una acción inmediata fue despedido por el equipo Stockton Kings de la G-League, en el que promedió 14 puntos y siete rebotes en 13 partidos.

La versión de la Policía es que Sakari Harnden (19 años) y Marayna Rodgers (23 años), ambas trabajadoras sexuales, tuvieron una disputa por un reloj de lujo. Chance Comanche se hizo pasar por un cliente sexual y según él, metieron a Rodgers en un automóvil y, después de comprar una botella de alcohol en una licorería cercana, hicieron parecer que tendrían relaciones sexuales con ella dentro del vehículo a cambio de dinero”.

“Comanche se hizo pasar por un cliente sexual y según él, metieron a Rodgers en un automóvil y, después de comprar una botella de alcohol en una licorería cercana, hicieron parecer que tendrían relaciones sexuales con ella dentro del vehículo a cambio de dinero".

Según indica Mundo Deportivo de España, "el jugador de baloncesto sostiene que ató a Marayna Rodgers con las manos en la espalda, estrangulando a la mujer con un cable HDMI durante 10 segundos... mientras Sakari la siguió estrangulando con las manos hasta que la mujer dejó de moverse. Chance Comanche y Sakari Harnden abandonaron el cadáver de Marayna Rodgers en una zanja en una zona desértica junto a una carretera, cubriendo el cuerpo con piedras”.