Con el corazón podrido



Este próximo domingo 8 de
mayo, nuevamente convocados por el enlutado poeta Javier Sicilia a quien le
mataron a su hijo en el estado de Morelos hace un mes, se están organizando
marchas en un sinnúmero de ciudades, incluida Ensenada, para juntar todas
nuestras voces y decirle a nuestros gobernantes: “Estamos Hasta la Madre”. Después de los
lamentables hechos Javier Sicilia, el poeta se expresó con serenidad e
indignación de padre herido, de ciudadano consciente: “México tiene el corazón
podrido”, interpretémosla como queramos, pero esta frase es más fuerte que el
“estamos hasta la madre”; esta vendría en segundo lugar. Es brutal la
afirmación, pero lo es más el horror y la vergüenza, o su ausencia, en esta
realidad que hemos permitido degenere hasta la insensatez. No hay más que
decir, la falta de escrúpulos y de dignidad, es alimento de la corrupción y de
una clase política que mezcla el crimen con la injusticia. Pero también, cada
uno de nosotros somos también responsable de esta decadencia. Javier Sicilia
vive la tragedia de miles de padres que han sufrido el asesinato de sus hijos
sin más motivo que el de ser jóvenes y haber nacido en una patria absurda. Ojala
que esta tragedia que le ha ocurrido al poeta y a muchos padres, constituyera
una sacudida para replantear la guerra contra el narcotráfico de Felipe
Calderón. Ojala se volviera una guerra contra la violencia y las ejecuciones,
pero una guerra apoyada por la sociedad mexicana, creo que es indispensable
replantear: ¿para que se libra la guerra?, ¿a nombre de quién?, ¿con qué
objetivo?; y que el objetivo no sea en el que el gobierno ha insistido en los
últimos años, que es matar más capos, desmembrar más organizaciones, que
terminan multiplicándose y destazándose entre sí, aumentando con ello la
violencia. Cuando nos manifestamos en memoria de las tragedias que viven muchos
padres, hijos y hermanos, lo hacemos pensando: ¿Quién nos oirá? ¿Alguien tendrá
piedad o miedo de nuestras voces? No nos queda sino el tal vez, sino el deseo,
sino la compasión. Ha pedido Javier Sicilia, con su hijo muerto y su último
poema, que paremos el odio. Que pidamos tregua. Es necesario pedir un cambio,
alzar la voz, sentirnos afectados, pero lamentablemente pareciera que en
México, la solidaridad no se nos da hasta que es a nosotros a quienes les
ocurre una tragedia. Creo que una de las causas por las que estamos tan perdidos
como nación. Es la propia indiferencia, estamos tan acostumbrados a las malas
noticias que ya nos parece natural vivir en uno de los países más violentos del
mundo y no hacemos más que mirar para abajo y decir, ¿y ahora? ¿Quién podrá
ayudarnos? La triste realidad es que nadie, nadie aunque lo aparenten, podrá
ayudar al país sino sus propios habitantes. Porque sí, somos más, pero son más
a los que les importa un carajo porque tienen que seguir con sus vidas sin
importar que a fulanito lo asaltaron, que sutanito lo levantaron “por error”, o
que Juan y Pedro los balacearon por accidente. Para los que vivimos en esta
esquina del norte del país, aun a la distancia, nos acongojamos por Sicilia. No
esta solo en su dolor, con el estamos todos los mexicanos, aun los que no
salgan a marchar. Es increíble como hemos perdido la capacidad de asombro, en
la tele, los noticiarios hablan a diario de decapitaciones, asesinatos de
jóvenes, narco fosas, mujeres asesinadas, inmigrantes asesinados... y no pasa
nada, nos sorprende lo mismo o menos que escuchar que subió el precio de la
gasolina. Suena tenebroso pero así es. Propongo participar en la marcha y
propongo elevar nuestras voces a las autoridades. ¡No nos quedemos atrapados en
la mediocridad de la apatía!, ¡no sigamos las inercias del cinismo social que
tanto convienen a las burocracias gubernamentales!, ¡Este próximo 8 hay que
salir a marchar! …tal vez sea nuestra última oportunidad. (Ensenada hace la
invitación a través del grupo Literario “Ecos del Mar”, para unirnos con la
marcha NACIONAL POR LA PAZ. Este
domingo 8 de Mayo, a las 5:00 p.m. en la Clínica 8 del IMSS, en Av. Reforma, para hacer el
recorrido Juárez, Ruiz, Calle Primera y Plaza Cívica). Dr. Alvaro de Lachica
Alianza Cìvica, Ensenada B.C. andale94@yahoo.com.mx