Educación financiera

Para lograr lo anterior, resulta fundamental que los miembros de la sociedad comprendan las reglas y normas contenidas en la ley, pues sólo así podrán, conscientemente, cumplir con ellas y prosperar, lo cual resulta indispensable para la continuidad de toda sociedad.

                  Un aspecto que muy pocos comprenden y, por ende, aplican, es el financiero.

                  Como es natural, las sociedades han ido evolucionando con el paso del tiempo, volviéndose más sofisticadas y, es deber de la ciencia del derecho seguir sus pasos y evolucionar a la par de estas, pues solo de ese modo es posible que cumpla con su objetivo de regular las conductas e interacciones de los individuos que la integran para hacer posible su convivencia, desarrollo y permanencia.

Existe la rama del "Derecho Financiero" que regula a este sistema y sus actos. La cual, si bien cumple con su cometido, no logra que las personas, que no cuentan con un conocimiento especializado en el tema, comprendan del todo su significado.

Y esto no solo por lo complejo de su lenguaje técnico, sino porque no se acaba de entender del todo la transición al sistema monetario y, en general al financiero aunado a su permanente y veloz cambio, volviendo a esta área casi incomprensible para la gran mayoría de las personas.

                  Sumado a que prácticamente ninguna profesión cuenta con una suficiente educación financiera. En el caso de la carrera de Derecho es prácticamente inexistente.

Esto nos lleva a que un gran número de la población no cuente con finanzas sanas, aún y cuando generan suficientes ingresos, lo que eventualmente tendrá como consecuencia la proliferación de personas en estado de pobreza y necesidad, lo cual resulta catastrófico, tanto para quienes sufran esta situación como para el Estado, al no poder cumplir con su deber fundamental de proporcionar las condiciones imprescindibles para el desarrollo económico de sus habitantes.

De ahí la urgente necesidad de proporcionar, desde los primeros grados educativos, una formación financiera suficiente que permita a los mexicanos contar, por lo menos, con la capacidad para administrar su propio dinero, dar seguimiento a sus finanzas, planear para el futuro, elegir productos financieros y mantenerse informado sobre asuntos en dicha área.

Lo que sin lugar a dudas traerá como consecuencia una mejora, no solo económica, sino en todos los aspectos importantes de la vida en sociedad, al volver a esta más fuerte y sana financieramente.

Como siempre un placer saludarlo, esperando que estas pocas letras hayan sido de agrado y, sobre todo de utilidad ¡Hasta la próxima!