Libertad de expresión
El pasado 07 de junio se celebró en nuestro país el día de la Libertad de Expresión, fecha instaurada en 1951 por los editores de periódicos y el entonces presidente de la República, Miguel Alemán Valdés, con el fin de destacar la trascendencia de una prensa libre e independiente para la democracia mexicana.
La libertad de expresión es un derecho humano básico, constitucional, fundamental, inherente y necesario a la naturaleza humana, consagrado en los artículos 6º y 7º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en el ámbito internacional en el artículo 19 de la Declaración de los Derechos Humanos de 1948.
Por libertad de expresión se entiende que: "Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y expresión. Este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas, ya sea oralmente, por escrito, o a través de las nuevas tecnologías de la información, el cual no puede estar sujeto a censura previa sino a responsabilidades ulteriores expresamente fijadas por la ley."
El derecho a la libertad de expresión no se puede restringir por medios indirectos, como el abuso de controles oficiales o particulares de papel para periódicos; de frecuencias radioeléctricas; de enseres y aparatos usados en la difusión de información; mediante la utilización del derecho penal o por cualquier medio encaminado a impedir la comunicación y la circulación de ideas y opiniones.
Si bien este derecho no puede coartarse ni ser previamente censurado, sí tiene límites, siendo alguno de ellos, por ejemplo, cuando se utiliza para ofender a una persona por sus defectos o diferencias o también por hechos que se estiman ilícitos y, sin cumplir con el deber de formular denuncias o de utilizar los cauces legales para sostener dichas afirmaciones.
El desbordamiento desmedido del ejercicio de la libertad de expresión, siguiendo el mismo ejemplo de hacerlo para ofender a otro, implica a su vez un incumplimiento al deber de proteger el derecho humano a la dignidad de la persona afectada.
En ese caso, las autoridades de todos los niveles de gobierno están obligadas a respetar tanto la libertad de expresión, así como la dignidad de las personas, debiendo hacer lo que esté a su alcance para protegerlos.
A esto la doctrina lo ha denominado "Derecho a defender"
"El derecho a defender es aquel que se ejerce respecto de las personas físicas, morales, comunidades, grupos sociales, o colectivos que históricamente han padecido discriminación, exclusión, condiciones de marginación y/o pobreza, entre otras. [...]Parte fundamental de la labor de las personas defensoras es la denuncia social, en busca de mejores condiciones tanto sociales como políticas o económicas para los más desfavorecidos". CNDH. Recomendación General No. 25. Sobre Agravios a Personas Defensoras de Derechos Humanos. párr. 64. México, 2016.
La verdadera libertad de expresión radica en la tolerancia y el respeto al pensamiento que mediante la palabra expone el prójimo, en la medida que lo hagamos seremos cada vez una mejor sociedad y personas.
Como siempre un placer saludarlo, esperando que estas pocas letras hayan sido de su agrado y, sobre todo de utilidad ¡Hasta la próxima!