Habían celebrado un cumpleaños momentos antes de que se incendiara el barco
El Servicio de Guardacostas suspendió la búsqueda de víctimas del barco que se incendió y hundió cerca de Los Ángeles, luego de rescatar 25 de los 34 cuerpos.
La misma institución proporcionó la transcripción de la comunicación en que la tripulación del barco Conception pidió auxilio porque la nave se incendiaba con 34 pasajeros encerrados.
El oficial despachador repetía cada frase que decía un mimbro de la tripulación porque en la radio había interferencia.
“¿La nave se incendió, correcto?, ¿es el Conception? ¿Hay 33 personas a bordo? ¿Están dentro del barco? ¿Ustedes pueden regresar a abrirles para que salgan? ¿No tienen equipo para extinguir? ¿Ustedes saltaron y escaparon? ¿La gente encerrada no tiene forma de escapar?”.
Después de esa pregunta solo hubo silencio un momento antes de que el oficial en el cuarto de mando agregara “en personal va en camino”. Fueron 135 kilómetros desde tierra continental al barco que se quemaba a unos 18 metros de la costa de las islas Santa Cruz.
Un miembro de la tripulación sin identificar dijo a las autoridades que los pasajeros acababan de celebrar un cumpleaños, de una adolescente, en una fiesta en que participaron los padres de la cumpleañera y sus amigos entre los pasajeros.
El mismo integrante de la tripulación reveló que entre los pasajeros atrapados se encontraba su novia.
En la base de la Guardia Costera en Oxnard, al norte de Los Ángeles, el señor James Kohl esperaba ansioso informes sobre el rescate. Dijo que su hermano, Mike, era el cocinero de la embarcación.
En el área de Santa Bárbara, de donde zarpó el bote recreativo de 25 metros de eslora, autoridades del condado establecieron un centro de apoyo y un número telefónico de asistencia a familiares de las víctimas familiares que, en su mayoría, viajaban desde otras regiones.
El fuego consumió la embarcación desde las 3:30 de la madrugada del lunes. Para cuando los bomberos del condado de Ventura alcanzaron el barco, ardía completamente. Los pasajeros estaban bajo cubierta encerrados en un galerón que servía como dormitorio general. Lo que quedaba del barco se hundió aproximadamente a las 7 de la mañana.
La travesía recreativa para buzos aficionados iba a tardar tres días, para aprovechar el puente de asueto del Día del Trabajo el lunes.
Para el mediodía del martes las autoridades contaban 25 de los 34 cuerpos rescatados y continuaba la búsqueda de los nueve restantes.