Marcela Gutiérrez-Graudinš recibe el Premio Espíritu Latino 2025 por su lucha ambiental
Marcela Gutiérrez-Graudinš, fundadora y directora ejecutiva de Azul, una organización de justicia oceánica que trabaja con comunidades latinas, fue reconocida con el Premio Espíritu Latino 2025 por Logro en Justicia Ambiental, otorgado por el Caucus Legislativo Latino de California.
El premio fue entregado el lunes 5 de mayo durante la 23ª ceremonia anual de los Premios Espíritu Latino en el Capitolio Estatal de California, en Sacramento. El evento, realizado en conjunto con la conmemoración del Cinco de Mayo, celebra a líderes latinos en áreas como defensa social, salud, educación, negocios, arte y servicio público.
"Me siento profundamente honrada y conmovida de recibir el Premio Espíritu Latino 2025 por Logro en Justicia Ambiental, un reconocimiento que comparto con las comunidades que han estado con nosotras, que se han organizado y que han construido poder junto a nosotras", expresó Gutiérrez Graudinš. "Son su trabajo y perseverancia los que han hecho posible este momento".
Gutiérrez Graudinš fundó Azul en 2011 para garantizar la participación y el liderazgo de las comunidades latinas en las políticas ambientales y la conservación costera. Después de observar cómo los esfuerzos tradicionales de conservación excluían con frecuencia a comunidades hispanohablantes e inmigrantes, creó Azul para brindarles el poder y la plataforma necesarios para defender los océanos.
Marce ha liderado campañas estratégicas de Azul que han sido clave para lograr, entre otras cosas, la prohibición estatal en California de la venta de aletas de tiburón y de bolsas plásticas de un solo uso; también fue fundamental para que la Casa Blanca de Biden-Harris incorporara la justicia oceánica como prioridad federal dentro de sus políticas ambientales. Además, ha coordinado coaliciones globales para impulsar un Tratado Mundial de Plásticos sólido. Sus estrategias han movilizado a comunidades latinas en California y más allá.
Según Gutiérrez Graudinš, avanzar en justicia ambiental significa proteger la naturaleza con las personas, no de ellas. "En Azul, sabemos que el poder comunitario está en el corazón de la verdadera justicia ambiental. Es nuestra voz colectiva, nuestra visión compartida y nuestra negativa a quedar fuera lo que impulsa soluciones duraderas para nuestras comunidades. Este premio es para todas las personas que creen que el océano no es solo un recurso: es nuestra conexión y nuestro futuro", añadió.
Actualmente, la organización se encuentra preparando una serie de programas y acciones de defensa ambiental para el Mes del Océano en junio, continuando su misión de centrar las voces latinas en el movimiento por la justicia oceánica y la sostenibilidad.
Para más información sobre Azul o sus iniciativas del Mes del Océano, visita www.azul.org.