Régimen cubano dispuesto a "dialogar" con nuevo gobierno de Trump
El gobernante del régimen cubano Miguel Díaz-Canel dijo el miércoles en las calles de Lajas, Cienfuegos, que estaban dispuestos a "dialogar" con el nuevo gobierno de Donald Trump.
"No tenemos nada en contra del pueblo norteamericano, ratificó. Estamos dispuestos a dialogar, en igualdad de condiciones con el gobierno de los Estados Unidos. Sin imposiciones, con respeto, y por supuesto nada que afecte nuestra soberanía ni nuestra independencia", expresó Díaz-Canel.
El dictador añadió que el triunfo de Trump "era un escenario previsto" para La Habana y "veníamos preparándonos".
Como es habitual en el discurso oficialista, el gobernante del régimen culpó al embargo estadounidense de la crisis de la isla.
Otros altos funcionarios del régimen cubano también hicieron declaraciones en días recientes sobre la línea del mencionado 'diálogo'.
El canciller, Bruno Rodríguez Parrilla, señaló que "mantendremos nuestras cordiales relaciones con el pueblo estadounidense y la disposición de dialogar, en igualdad de condiciones, con gobierno de EEUU, a pesar de la relación bilateral totalmente asimétrica y bloqueo nos han impuesto por 62 años".
En ese mismo sentido, el viceministro de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío escribió en su perfil de X: "Tenemos relaciones de amistad y respeto con prácticamente todos los países del mundo y estamos dispuestos a desarrollarlos también con EEUU, con independencia del partido que esté en el poder y sobre la base del respeto a nuestra soberanía y la no injerencia".
Johana Tablada, subdirectora general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (MINREX), compartió las declaraciones de Díaz-Canel, reiterando el interés de 'dialogar'.
También Enrique Villuendas, funcionario del Departamento Ideológico del Partido Comunista escribió que apoyaba las declaraciones de Díaz-Canel: "Dispuestos a dialogar en pie de igualdad, ¡pero sin injerencias ni menoscabo a la soberanía de Cuba!".
Estas declaraciones fueron reproducidas por varios medios de la prensa oficialista, enfatizando en los titulares la cuestión del "diálogo". La réplica de esta línea de mensaje en varios funcionarios y en los medios de prensa controlados por el Partido Comunista de Cuba refrenda que no se trata de una declaración fortuita y que existe la intención de que sea percibida, tanto por la comunidad internacional como por la recién electa administración norteamericana.
No es la primera vez que La Habana se muestra 'dispuesta' a 'dialogar' con los gobiernos de Estados Unidos. En 2020, tras el triunfo de Joe Biden, también el régimen ofreció 'dialogar sin renunciar al socialismo'.
"Estamos dispuestos a discutir sobre cualquier tema, lo que no estamos dispuestos a negociar es con la Revolución, el socialismo y nuestra soberanía. Los principios no estarán nunca sobre la mesa", dijo Díaz-Canel en diciembre de 2020, en una sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP).
Igualmente en 2016, durante el primer triunfo de Trump, el régimen cubano aseguró que podría dialogar, pero con "respeto mutuo" y "sin concesiones".
"La parte cubana tiene la voluntad de avanzar en la mejora de las relaciones y la construcción de una convivencia pacífica, sin tener que hacer ninguna concesión en los principios en los que Cuba cree firmemente", declaró la entonces la directora para EE. UU. de la Cancillería cubana, Josefina Vidal.
También Raúl Castro hizo llegar entonces una nota de felicitación a Trump. "El presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de la República de Cuba, Raúl Castro Ruz, envió un mensaje de felicitación al Sr. Donald J. Trump por su elección como Presidente de los Estados Unidos de América", indica el texto publicado en la página web del Ministerio cubano de Relaciones Exteriores.
En enero de 2017, incluso, la delegación cubana fue invitada a la Ceremonia de Inauguración Presidencial del país norteamericano.
Por supuesto, el ofrecimiento de "diálogo" del castrismo tiene características especiales. Cuando se refieren a "igualdad", "sin injerencias", "soberanía" en realidad significan excluir de los intercambios cualquier mención al respeto a los derechos humanos y a la democratización del régimen.
Donald Trump ganó los comicios electorales estadounidenses el pasado 5 de noviembre, imponiéndose frente a Kamala Harris, la candidata demócrata. Asumirá la presidencia el 20 de enero de 2025.
Desde su campaña y con el reciente nombramiento del senador cubanoamericano Marco Rubio como su secretario de Estado, la entrante administración ha anunciado que vienen cambios y sanciones contra el régimen de La Habana.