Logra perder el miedo a volar; toma en cuenta estas 3 cosas
Lograr volar a través del avión es una de las principales hazañas del ser humano y sin duda uno de los inventos más importantes de toda la historia. Sin embargo, y aunque el primer vuelo comercial fue hace más de 100 años, aún hay personas que no logran perder el miedo a volar.
Esto porque perder el miedo a volar se trata no sólo de un miedo relativamente nuevo, al que se le busca solución desde hace poco tiempo (contrario al miedo a las arañas o los espacios cerrados por ejemplo) si no que puede llegar a ser uno de los miedos más complicados de sobrellevar, incluso cuando la persona que lo padece ya haya volado en varias ocasiones. Esto puede llegar a ser un gran problema tomando en cuenta que la mayoría de los viajes largos en el mundo se hacen por medio de avión.
Es por ello que si se sufre de este miedo o se conoce a alguien que lo haga es muy importante aprender a cómo superarlo. A continuación te presentamos 3 cosas a tener en mente que seguramente serán de ayuda si se quiere perder el miedo a volar.
Recordar que los aviones no se “caen”
Es una creencia bastante común que los aviones cuando caen lo hacen en picada y de manera vertical, lo cual realmente es algo que solo se ve en las películas. Los aviones al perder altura, por cualquier tipo de falla, lo harán planeando de manera pausada y controlada según la situación, por lo que incluso si se estuviera en el peor de los casos lo más probable es que todo salga bien. No hay porque preocuparse de que el avión en el que viajemos se desplome, es algo prácticamente imposible.
Que las turbulencias no son un peligro real
Las turbulencias son una de las principales causas de que la gente le tema a volar, ya que sibien no son un peligro real pueden llegar a ser bastante incómodas. Lo primero que hay que saber es que existen turbulencias ligeras, moderadas así como severas y que todos los aviones que se encuentran en circulación están diseñados para soportar cualquiera de ellas.
Otro dato a tomar en cuenta es que las turbulencias más fuertes son las menos comunes ya que suelen ser evitadas, esto gracias a que toda aeronave dispone de radares meteorológicos para detectarlas y rodearlas, cuando es posible claro. Si no hay de otra más que pasar por la zona donde se encuentran aún así en la mayoría de los casos se sentirían sólo las más ligeraso moderadas. En pocas palabras no hay de que preocuparse, las turbulencias no son un peligro de seguridad real.
Los aviones ven aunque nosotros no lo hagamos
Otro de los temores más comunes de la gente a la hora de volar es que en ocasiones no es posible ver nada al exterior desde el avión al aterrizar por lo cual mucha gente piensa que un accidente puede suceder. Sin embargo, aunque nosotros como pasajeros no logremos ver hacia afuera (e incluso en algunos casos los mismos pilotos) esto no representa ningún problema ya que el avión sí es capaz de “ver” claramente. Gracias a los sistemas de navegación que vienen integrados en toda aeronave como lo son radares, infrarrojos, así como pantallas especiales, pueden aterrizar sin inconvenientes la visibilidad sea muy baja o nula.
Una recomendación extra además de estos recordatorios que puede ser útil para lograr perder el miedo a volar es hacerlo a través de un viaje privado, lo cual no es tan caro como la mayoría de la gente piensa.
Empresas como Aerosafín, que rentan desde jets privados hasta aerotaxis, hacen fácil el viajar en vuelos privados. Si bien se trata de una recomendación un poco extravagante, tal vez sea la solución para algunas personas para superar su miedo. No se pierde nada con intentarlo.