"No soy delincuente, por favor exijan justicia por mí... Me arrebataron la vida"
Tijuana, B.C., Septiembre 23.- El hoy occiso ejecutado el pasado martes en Plaza Galerías Hipódromo fue identificado como Juan Carlos "N", un ingeniero industrial que había acudido al gimnasio ubicado sobre la segunda planta de dicha plaza.
Juan Carlos, de 36 años de edad, iba acompañado de un amigo y se dirigían al elevador, cuando recibió al menos un disparo de calibre 9mm en la región craneoencefálica, quedando sin vida al momento. El acompañante de la víctima relató escuchar un sonido similar a fuegos artificiales; momentos después, Juan Carlos se desvaneció, había sangre brotando de su cabeza.
"La persona que iba con él saliendo del gimnasio, que es su amigo de toda la vida, le tocó vivirlo, dijo que a penas iban saliendo del gimnasio y en las afueras escucharon como un cohetes; cuando volteó a decirle a Juan Carlos, él iba cayendo de frente, no vio quien realmente lo hizo, fue por la espalda”, declaró, José Eduardo "N", primo de la víctima.
El presunto responsable
Según los primeros indicios a cargo de la Agencia Estatal de Investigación especializada en delitos contra la vida, el presunto responsable fue un sujeto vestido con camisa roja, gorra y pantalón de mezclilla, quien presuntamente huyó por el Boulevard Aguacaliente con rumbo a Plaza Patria.
En el ataque, Juan Carlos recibió un impactó en la cabeza, mientras que una empleada de un restaurante italiano, identificada como Ivett "N" resultó lesionada en el abdomen siendo atendida en primera instancia por Cruz Roja Mexicana y posteriormente trasladada a un hospital del IMSS.
"Un hombre perfecto"
“Mi corazón está quebrado, mi alma está deshecha”, declaró Victoria, madre de la víctima, al recibir la noticia un día después del asesinato de su hijo en la Plaza Galerías. La señora no se imaginaba que un día después estaría haciendo los arreglos funerarios de su hijo.
La noticia cayó como un balde de agua fría; su hijo se caracterizaba por su esfuerzo y dedicación en los estudios y dedicación.
“Él era una persona honesta, trabajadora, al pendiente de mi, cualquier cosa que él sabía que alguno de sus amigos necesitaba, él iba y ayudaba, se encargó de estudiar siempre, hacer sus cosas correctas, fue un hombre perfecto, no podría terminar de decir las maravillas que él era como ser humano”, comentó.