Aumentar la vigilancia fronteriza también incrementa la corrupción de agentes
Un estudio de la Universidad Estatal en San Diego (SDSU) determinó que al aumentar la vigilancia fronteriza, también incrementa la corrupción entre algunos agentes de la patrulla fronteriza y de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
El sociólogo David Jancsics, autor de la investigación, dijo que se enfocó en 160 casos de oficiales que fueron detenidos y enfrentaron cargos.
El 71 por ciento de ellos estaba relacionado con el tráfico de drogas y de personas, y sus ingresos por sobornos acumularon millones de dólares.
Aunque 160 casos es un número pequeño comparado con el personal de 60 mil empleados de CBP, que incluye a la patrulla, algunos de los casos destacan por su gravedad.
Jancsics narró que en El Paso, un agente comenzó a dejar pasar drogas a través de la frontera poco después de que consiguió el trabajo como oficial fronterizo.
Sus actos de corrupción continuaron durante cuatro años, del 2003 al 2007, cuando lo detuvieron.
Al investigar a ese agente, en asuntos internos descubrieron que se trataba de un narcotraficante encubierto, que consiguió el trabajo precisamente para dejar pasar drogas por la frontera luego del refuerzo de vigilancia que derivó de los ataques terroristas del 2001.
Las autoridades calcularon que el oficial dejó pasar drogas por un valor, en ese entonces, de unos 288 millones de dólares.
“Este es solo un ejemplo de cómo los carteles de la droga se infiltran en la agencia”, dijo el investigador.
El sociólogo de San Diego calcula que los actos conocidos de corrupción han dejado en sobornos a agentes fortunas que no habrían conseguido como empleados federales del gobierno.
Jancsics dice que los actos de corrupción entre oficiales aumentan con dos elementos: una mayor vigilancia fronteriza, por la que las organizaciones narcotraficantes y de tráfico de personas buscan corromper oficiales, y la corrupción es más frecuente entre agentes durante los primeros cinco años en el puesto.
La investigación de la Universidad Estatal en San Diego incluyó trabajos periodísticos, informes de cortes, averiguaciones de la Oficina de Investigaciones Federales (FBI) y datos internos de CBP, entre otros.
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