Empresas deben cumplir obligaciones críticas al cierre fiscal 2025, alerta especialista
Inventarios, estados financieros y evidencia documental serán determinantes para evitar sanciones y fortalecer la posición fiscal rumbo a 2026.

Tijuana, 11 de Diciembre. - Con la proximidad del cierre fiscal 2025, especialistas recordaron que las obligaciones ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) se mantienen vigentes hasta el último día del ejercicio, por lo que omitir responsabilidades formales podría derivar en sanciones para las empresas.
El abogado fiscalista Jorge Alberto Pickett Corona explicó que la Ley del Impuesto Sobre la Renta (LISR) establece deberes esenciales para las personas morales al finalizar cada ejercicio, entre ellos la elaboración del estado de posición financiera y el levantamiento del inventario físico de existencias.
"El cierre del ejercicio implica elaborar un estado de posición financiera y levantar un inventario físico de existencias, ya que ambos documentos son determinantes para efectos contables y fiscales", señaló Pickett.
El especialista precisó que estas obligaciones tienen impacto directo en determinaciones fiscales posteriores, por lo que su correcta integración es indispensable para evitar inconsistencias que pudieran derivar en revisiones o ajustes.
Pickett recordó que la LISR exige que el estado de posición financiera y el inventario se formulen con corte al cierre del ejercicio, aunque el Reglamento otorga cierta flexibilidad para la práctica de inventarios, siempre que se apliquen los ajustes necesarios para reflejar el saldo real.
Asimismo, subrayó que el artículo 69-H requiere evidencia documental del proceso, como formatos de conteo, conciliaciones, reportes y fotografías, especialmente en el caso de contribuyentes que utilizan métodos alternativos para determinar el costo de lo vendido.
El estado de posición financiera también tiene efectos directos en cálculos fiscales específicos, como la determinación de pérdidas en la enajenación de acciones. Cualquier inconsistencia en estos documentos podría distorsionar valores relevantes y generar complicaciones en operaciones societarias futuras.
Pickett concluyó que un cierre de ejercicio bien ejecutado no sólo evita contingencias ante la autoridad fiscal, sino que también fortalece la posición contable y fiscal de las empresas de cara a 2026.



