Mejoredu señala la necesidad de coordinación entre educación, salud y bienestar para enfrentar las brechas de desigualdad social.
Mejoredu muestra que la pandemia por Covid-19 evidenció brechas acumuladas en materia de salud, educación y bienestar
La Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu) publicó el estudio Transversalidad, Interseccionalidad y Coordinación Intersectorial entre Educación, Salud y Bienestar, el cual permitió identificar, analizar y recuperar la experiencia de varios programas, estrategias y acciones, en el ámbito federal y de algunas entidades federativas, desarrolladas por o entre los sectores mencionados, y que tienen una relación directa con los centros educativos, los contextos escolares o la población en edad escolar. También permitió la recuperación de perspectivas y experiencias de servidores públicos que participan en ellas.
Con este trabajo, que recupera un estudio previo sobre educación para la salud y el bienestar en escuelas primarias (Mejoredu, 2024), se busca enriquecer la disponibilidad de información para la toma de decisiones, a través del análisis de instrumentos de gestión pública e intervenciones educativas que contribuyan al desarrollo de políticas de educación básica y media superior, como lo establece el Programa Institucional 2020-2024 de Mejoredu.
Está dirigido a diseñadores y ejecutores de política pública interesados en abordar problemas sociales con enfoques integrados y coordinados, además de interpelar a diferentes actores sociales, especialmente del ámbito educativo, para pensar y actuar desde sus distintos campos de acción como coadyuvantes, copartícipes y detonadores de procesos integrales que permitan avanzar hacia una educación —acompañada de salud y bienestar— con justicia social y al alcance de todas y todos.
El estudio muestra que la pandemia por Covid-19 acentuó brechas acumuladas en materia de salud, educación y bienestar, ligadas a los retos para asegurar derechos humanos básicos, lo cual convoca a repensar las acciones gubernamentales en la materia, con la finalidad de recuperar experiencias y abrir nuevos horizontes de trabajo.
El estudio propone atender el tema de la gestión interinstitucional en materia de educación, salud y bienestar desde tres enfoques articulados: transversalidad, entendida como un marco común de temas, visiones, objetivos y modos de actuar que plantean una mirada integral, abordaje y compromiso específico para promover la coordinación y cooperación de distintas dependencias gubernamentales; la interseccionalidad, definida como una manera de mirar la convergencia de múltiples desigualdades o vulnerabilidades asociadas con el género, la clase, la etnia o la condición migratoria; y la intersectorialidad, pensada como coordinación, articulación o integración de los sectores en torno a la gestión y atención de problemas públicos complejos, que posibilitan la interacción y sistematización de saberes, conocimientos, información y presupuestos.
Los hallazgos permiten a Mejoredu aportar una serie de recomendaciones entre las que se cuentan: favorecer una mayor integración interinstitucional entre sectores, especialmente relacionada con la atención de problemas del ámbito educativo; impulsar el trabajo intersectorial entre Educación, Salud y Bienestar; armonización y vinculación de las normas y los procesos, y profesionalizar equipos de trabajo al interior de los sectores para que sean responsables de articular los esfuerzos y de dar seguimiento puntual a los trabajos realizados en los consejos, los comités o las comisiones intersectoriales que se definan.
Aunado a ello, favorecer la continuidad del personal y equipos de trabajo responsables de la coordinación con otras instancias gubernamentales; realizar diagnósticos conjuntos que generen información clave para los sectores de Educación, Salud y Bienestar, desde una perspectiva de largo plazo, y promover mecanismos de formulación, implementación y evaluación de políticas basados en enfoques transversales, como derechos humanos, equidad de género e interculturalidad, entre otros.
Finalmente, también se sugiere promover la realización de estudios e intercambio de información sobre los avances en temas de intersectorialidad, transversalidad e interseccionalidad en el ámbito federal, estatal y municipal; establecer metas y objetivos compartidos, desde los que cada sector asuma responsabilidades específicas; incrementar la coordinación, interacción e interdependencia entre los niveles de gobierno (nacional, estatal y local) y pensar las soluciones en el corto, mediano y largo plazo, para la atención sostenible de los problemas públicos asociados a la relación entre Educación, Salud y Bienestar.