Al menos 28 heridos tras atropello masivo en Múnich, Alemania

Tijuana, 13 de Febrero. - Un atropello masivo que las autoridades investigan como un posible atentado dejó al menos 30 heridos, varios de ellos en estado grave, en el centro de Múnich. El presunto autor, un afgano de 24 años, fue detenido tras ser reducido por la policía, que efectuó disparos para neutralizarlo.

El incidente ocurrió poco antes de las 11:00 (10:00 GMT) cuando un vehículo embistió a una manifestación de empleados públicos convocada por el sindicato Ver.di, en la que participaban alrededor de 1.500 personas. Según un portavoz policial, el conductor se aproximó por la parte trasera de la marcha, esquivó los vehículos policiales y arrolló a los manifestantes.

El primer ministro de Baviera, Markus Söder, indicó que, debido al "modus operandi", las autoridades consideran el suceso como un atentado. La Fiscalía de Múnich, a través de su Central para la Lucha contra el Extremismo y el Terrorismo, asumió la investigación.

El semanario "Der Spiegel" informó que el sospechoso habría publicado contenido islamista en redes sociales antes del ataque. Sin embargo, las autoridades no han confirmado esta información. Se sabe que el detenido tiene antecedentes por delitos relacionados con drogas y hurtos. Nacido en Kabul en 2001, llegó a Alemania a los 15 años y su solicitud de asilo fue rechazada, aunque gozaba del estatus de "tolerado", lo que le permitía permanecer en el país.

El canciller alemán, Olaf Scholz, exigió que el autor sea castigado con "todo el peso de la ley" y expulse del país tras cumplir su condena. "Quien comete delitos en Alemania no solo debe ser castigado e ir a la cárcel, sino también perder su permiso de residencia", declaró desde un acto de campaña en Fürth.

Friedrich Merz, líder de la oposición y favorito en las encuestas para las elecciones del 23 de febrero, afirmó en la red social X que "la seguridad de las personas tendrá prioridad" en su gobierno. "Impondremos la ley y el orden. Todos deben volver a sentirse seguros en nuestro país", aseguró.

Alice Weidel, candidata a canciller por la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), reiteró su postura de deportaciones masivas. "La respuesta a este ataque debe ser: deportación, deportación, deportación", enfatizó.

El ministro de Economía y candidato de Los Verdes, Robert Habeck, abogó por reforzar la seguridad y mejorar la aplicación de las leyes migratorias tras los comicios.

El atentado ocurre a solo diez días de las elecciones y en la antesala de la Conferencia de Seguridad de Múnich, un evento global que contará con un despliegue de 5.000 agentes. La inmigración se ha convertido en el tema central de la campaña, especialmente tras ataques previos como el perpetrado por un refugiado saudí en diciembre en Magdeburgo, que dejó cinco muertos y 300 heridos, y el asesinato de dos personas en enero a manos de un afgano en Aschaffenburg.

Según las últimas encuestas, el bloque conservador de Merz lidera con un 30 % de intención de voto, seguido por AfD con 20 % y los socialdemócratas de Scholz con 15 %. Analistas políticos advierten que el ataque de Múnich podría influir en los resultados electorales y reforzar el discurso de los partidos que abogan por un endurecimiento de las políticas migratorias.