Congresista en EE.UU preocupado por salud del preso político Carlos Manuel Pupo
La organización Cubalex informó la semana pasada que Pupo recibió un fuerte golpe en la cabeza y en una pierna, previamente operada, cuando se dirigía al baño del centro penitenciario.
El congresista cubanoamericano Mario Díaz-Balart manifestó su preocupación por la salud del preso político Carlos Manuel Pupo Rodríguez, quien ha estado sin recibir atención médica luego de la caída que sufrió en el campamento conocido como "Angola", en San Antonio de los Baños.
"Estoy profundamente preocupado por la salud del activista de derechos humanos Carlos Manuel Pupo Rodríguez (...) Según informes, Pupo Rodríguez se encuentra en mal estado de salud y no está recibiendo el tratamiento médico crítico que necesita", explicó el político estadounidense.
Además, Díaz-Balart añadió que "su encarcelamiento y el trato inhumano que está recibiendo son violaciones de los derechos humanos, y los responsables deben rendir cuentas. Debe ser liberado sin condiciones de inmediato y recibir la atención médica urgente y los medicamentos que necesita".
La organización Cubalex informó la semana pasada que el preso político recibió un fuerte golpe en la cabeza y en una pierna, previamente operada, cuando se dirigía al baño del centro penitenciario.
A pesar de la gravedad de las lesiones, al menos hasta la semana anterior no había recibido la atención médica que requiere, ni tampoco le han suministrado los medicamentos que necesita para tratar la diabetes y la hipertensión que padece.
La salud del reo, de 70 años, cada día se deteriora más.
Pupo Rodríguez fue condenado a cinco años de prisión por participar en las manifestaciones antigubernamentales del 11 de julio de 2021 en San Antonio de los Baños, Mayabeque.
Durante su encarcelamiento, el preso político ha realizado diversas huelgas de hambre para denunciar las precarias condiciones en que viven los reos y la falta de atención médica adecuada.
Pupo Rodríguez es uno de los 1 119 presos políticos existentes en Cuba en julio de 2024, de acuerdo con un informe de Prisoners Defenders (PD).
Desde el 1 de agosto de 2023 hasta el 31 de julio de 2024 se han sumado 160 nuevos presos políticos a la lista, lo que representa un promedio de más de 13 nuevos casos cada mes.