Día Mundial de las Ballenas y los Delfines
El 23 de Julio tiene como objetivo fortalecer las medidas de conservación de estas especies y evitar la caza ilegal.
El 23 de julio es el Día Mundial de las Ballenas y los Delfines, se conmemora con el propósito de recordar su importancia en el mundo.
La historia dio comienzo el 2 de diciembre de 1946 cuando se fundó la Comisión Ballenera Internacional (CBI), tras un panorama de matanza de delfines y ballenas vivido en ese momento. Posteriormente, la misma CBI proclamó el Día Mundial Contra la Caza de Ballenas, que más tarde se convirtió en Día Mundial de las Ballenas y los Delfines.
Ambos animales pertenecen al orden de los cetáceos, un grupo de mamíferos marinos completamente adaptados a la vida acuática. Tienen periodos de gestación de entre 7 y 13 meses, dando a luz desde el vientre materno a sus crías que se alimentan de leche materna en sus primeros periodos de vida.
Viven aproximadamente entre 20 y 30 años, con algunas excepciones; son de sangre caliente; y respiran aire a través de los pulmones, por lo que suben a la superficie para respirar. En la espalda cuentan con una aleta dorsal que les aporta estabilidad y su cola termina en una aleta caudal horizontal que aporta velocidad a sus desplazamientos.
Existen dos tipos principales de cetáceos: las dentadas y las barbadas.
Ballenas
Las ballenas son los animales más grandes del mundo; tienen un oído excelente; sus cajas torácicas colapsables las ayudan cuando se sumergen a profundidad. Además, poseen una capa de grasa muy gruesa que las aísla para protegerlas del frío.
Las ballenas tienen unos orificios en la parte superior de la cabeza llamados "aventadores", los cuales actúan como nuestros orificios de la nariz. Las ballenas barbadas tienen dos aventadores y las dentadas solo uno.
Su contribución
Cada ejemplar de ballena retiene a lo largo de su vida un promedio de carbono equivalente a lo que capturan 1,000 árboles. Además, al morir sus cuerpos se hunden hasta el fondo oceánico, llevando consigo cerca de 33 toneladas de carbono que sale de la atmósfera por siglos.
Estos cetáceos sustentan la productividad del fitoplancton que contribuye con al menos el 50% del oxígeno producido.
Su presencia en México
De las 14 especies de ballenas que existen en el mundo, México tiene la presencia de 8, cada una de ellas con sus propios hábitos de migración o desplazamiento.
A México llegan dos especies migratorias, la ballena gris (Eschrichtius robustus) y la ballena jorobada (Megaptera novaeangliae). Ambas especies llegan en verano para la época de cortejo y apareamiento.
Pie de foto: Ballena gris (Eschrichtius robustus)
Delfines
Los delfines son de los animales más inteligentes del mundo; son bastante sociables; viajan en grupos llamados "vainas"; y se caracterizan por nadar más rápido que la mayoría de los mamíferos, gracias a su condición corporal, la forma de sus aletas y la textura de su piel. Se comunican usando una variedad de sonidos parecidos a clics, silbidos y otras vocalizaciones. También, se comunican de forma no verbal mediante el tacto y posturas.
Respiran aire fresco a través de un orificio ubicado en la parte superior de sus espaldas.
Su contribución
Se encuentran en los niveles más altos de las cadenas tróficas alimentándose de peces, moluscos, crustáceos y hasta de algunos mamíferos. Su presencia evidencia la buena calidad del agua y la riqueza ecológica. Así mismo, su presencia es un buen indicador económico pesquero.
Su presencia en México
En la actualidad se conocen 32 especies de delfines de agua salada y 5 de agua dulce alrededor del mundo. En México se encuentran 19 especies que representan el 53% de biodiversidad:
El delfín nariz de botella, delfín fraser, delfín moteado del Atlántico, delfín risso, delfín girador, delfín dientes rugosos, delfín manchado tropical, delfín Clymene, delfín listado, delfín común de rostro largo, delfín común de rostro corto, delfín liso del norte, delfín de costados blancos del pacífico, delfín calderón, delfín tornillo, orca falsa, delfín de cabeza blanca y el delfín de Irawadi.
Es posible encontrar ejemplares en las aguas costeras y oceánicas del Golfo de México y el Caribe como en el litoral del océano Pacífico y Golfo de California.