Familias de israelíes muertos en la guerra encuentran una nueva esperanza en la extracción de esperma

Tijuana, 06 de Diciembre. - Luego del ataque de Hamás en el sur israelí el 7 de octubre, el Gobierno de Israel declaró la guerra y ha lanzado bombardeos diarios sobre la franja.

Originalmente, Israel llamó a la población palestina a evacuar hacia el sur, donde dijo que estarían seguros; y sorpresivamente, también atacaron dicha zona.

El ministerio gazatí anunció que el número total de muertos en Gaza desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás el 7 de octubre superó las 15 mil 200 personas palestinas asesinadas, un fuerte salto respecto del recuento anterior de más de 13 mil 300, sin embargo, dejaron de publicar actualizaciones diarias del conteo de fallecidos desde el 11 de noviembre debido a las interrupciones de las comunicaciones.

Cabe destacar, que a través de mediadores, Israel y Hamas continúan negociando la posible liberación de rehenes de Gaza, lo que podría permitir otra pausa en las hostilidades, a pesar del fin de la tregua de una semana.

La reanudación de los combates significa que "la pesadilla ha vuelto para los civiles", expresó el jefe de la Cruz Roja Internacional, pues la pausa de siete días marcó una gran diferencia en términos de apoyo humanitario a los habitantes de Gaza.

La profesora y trabajadora social médica en el Hospital Kaplan de Israel, Shir Daphna-Tekoah, quien, aunque no es ajena a los traumas, narró su vivencia tras ser llamada a trabajar el 7 de octubre, el día en que Hamas atacó granjas, pueblos y un festival de música en Israel, la magnitud del desastre se hizo evidente rápidamente.

"He visto morir a docenas de personas en accidentes o tiroteos, pero esto ha sido lo más duro que he hecho en mi vida", declaró.

Como directora del centro de crisis para casos de violación del hospital, fue llamada cuando surgieron denuncias de agresiones sexuales. Pronto todos se pusieron manos a la obra cuando la sala de urgencias se llenó de heridos.

A Daphna-Tekoah le tocó apoyar a las familias que se despedían de sus seres queridos asesinados. De una familia dijo: "Les pregunté si querían dar las gracias a su hijo o pedir perdón por algo. La madre dijo: 'Siento mucho haberte dejado ir a la fiesta y no haberte protegido'".

Entonces, Daphna-Tekoah planteó otra pregunta. "Le pregunté: '¿Quieres que te informe sobre la conservación del esperma?'"

"Antes solo había agonía y oscuridad en los ojos de la madre y de repente apareció un destello de luz y esperanza", agregó la especialista.

Daphna-Tekoah se puso inmediatamente en contacto con la dirección del hospital, y pocas horas después ya tenían el visto bueno legal necesario. A la mañana siguiente, ya se había recuperado el esperma de varias víctimas del festival Nova.

Ahora, más de siete semanas después, los hospitales israelíes se han visto inundados de solicitudes para congelar criogénicamente el esperma de los muertos en el conflicto, según afirman los responsables hospitalarios.

Anteriormente, la recuperación póstuma de esperma (RSP por sus siglas en inglés) estaba abierta a las parejas (siempre que otros familiares no se opusieran), pero los padres de los fallecidos tenían que solicitar un permiso legal.

Pero el Ministerio de Sanidad acaba de reducir drásticamente los trámites burocráticos. En un comunicado publicado en su sitio web, afirma que se ha dado instrucciones a los hospitales para que, durante la guerra, aprueben las solicitudes de RSP "de los padres del fallecido, sin remitirlas a un tribunal de familia".

El esperma sigue vivo brevemente tras la muerte, por eso es posible que los médicos (generalmente un especialista en fertilidad o urología) lo recuperen del tejido testicular. Los espermatozoides vivos que se encuentren se transfieren y congelan en nitrógeno líquido.