Docente pidé a SEP cancelar el ciclo escolar 2020-2021 ante la falta de recursos de su alumnos
Pandemia causa rezago escolar.
Tijuana, B.C., 30 de Agosto de 2020.- El pasado 25 de Agosto, una docente de primaria de Sabinas Hidalgo, en Nuevo León pidió a la SEP (Secretaría de Educación Pública) que cancele el regreso a clases virtual, debido a que muchos de sus alumnos y cientos de infantes en México no tienen los recursos necesarios para tomar las clases a distancia.
El regreso virtual ha resultado problemático tanto para alumnos, como maestros y padres de familia, porque la tecnología y el desconocimiento social causa un aletargo en la sociedad, además de influir en el uso diario de las personas. Obligados por el Covid-19 a iniciar el ciclo escolar 2020-2021 en línea
La pandemia nos ha traído distintas historias admirables de profesores en comunidades de bajos recursos que hacen todo lo posible para que sus alumnos no se queden sin estudiar, la profesora que viaja en bicicleta para dar clases a sus alumnos sin internet, el docente que camina 10 Km diarios dando clases a domicilio, por mencionar algunos. Este tipo de acciones extraordinarias han provocado que todos volteen a ver a la SEP, para ver que cambios o mejoras se pueden implementar.
De la misma forma la profesora , Laura Marisol Camacho Saristegui, posteo en su cuenta de Facebook para exponer la situación por la que atraviesan sus alumnos.
“Es muy duro cargar con todo el trabajo el cual hago con mucho gusto. Pero cargar con la situación en la que viven mis alumnos es demasiado. Veo como hacen el esfuerzo en estos días, están animados, pero me parte el corazón al leerlos”, escribió la maestra.
Pidió que la Secretaría a cargo de Esteban Moctezuma Barragán que retome el curso escolar cuando exista la posibilidad de hacerlo presencial, con el fin de no afectar a los estudiantes, ni tengan que lidiar con los problemas del difícil acceso a las tecnologías de la información.
Camacho Saristegui comentó que desde que este 25 de agosto se dio el regreso a clases ha tenido que leer las dificultades por las que atraviesan los alumnos y sus familias al tener que trabajar horas extra para tener saldo en el teléfono y poder enviar sus tareas. También confesó sentirse triste al no poder hacer nada por la situación que enfrenta la niñez mexicana en estos tiempos, ya que anteriormente si existía algún problema, la escuela funcionaba como una distracción y no era obligado el uso de la tecnología en casa, pues en algunas aulas se contaba el material.
“Como maestra, siempre te preocupas por tus alumnos y sabes que por más que te duela no puedes cambiar su situación. Pero podíamos consolar, dar una sonrisa, un abrazo, compartir de nuestro lonche. Llevar las copias aunque fuera de nuestro dinero, llevar nuestra laptop para poner algún video educativo. Y ahora en la distancia todo se complica y las desigualdades salen a relucir mucho más”.