Entre unicornios y aventureros, así transcurrió el primer día de actividades de la Cumbre de Emprendedores ASEM 2021

“Queremos celebrar a las heroínas y héroes que decidan fundar empresas formales en este país, porque las MIPYMES representan más del 99% de las unidades productivas del país, generan empleos formales y participan casi del 40% del Producto Interno Bruto ”, indica Juana Ramírez, presidenta de la Asociación de Emprendedores de México (ASEM), durante la inauguración de la cuarta edición de la Cumbre de Emprendedores ASEM 2021.

En el primer día de actividades, el evento arrancó con dos paneles, uno dedicado a los aventureros que trabajan para startups mexicanas y latinoamericanas; el otro fue sobre los unicornios y el papel que tienen estas empresas como fuente de inspiración para otros emprendedores.

Los unicornios son reales y en América Latina hay pruebas de su existencia. Los

fundadores de Clip, Kavak, Cornershop, Bitso y She Works se reunieron para platicar sobre los factores que transformaron sus ideas en las startups más importantes de la región.

Esta ronda estuvo moderada por la también unicornio Silvina Moschini, CEO de She Works, una plataforma que, a través de la tecnología, conecta a mujeres profesionistas con los puestos de trabajo que más se adaptan a sus vidas; recientemente se estrenó como productora ejecutiva de Unicorn Hunters, un reality show que busca emprendedores con el potencial de convertirse en unicornios y en el que también participa Steve Wozniak, cofundador de Apple.

Los participantes del panel de la ASEM fueron Loreanne García, cofundadora y Chief Oficial de Personas de Kavak; Daniel Undurraga, cofundador y CEO de Cornershop; Adolfo Babatz, cofundador y CEO de Clip y Pablo González, cofundador y CDO de Bitso. Todos ellos hablaron acerca de los obstáculos, retos financieros y regulatorios, pero también de los propósitos y factores que llevaron a sus empresas a convertirse en lo que son hoy en día.

Todos los participantes coincidieron en que para convertirse en unicornio (empresa valuada en más de mil millones de dólares), más allá del financiamiento, lo importante es rodearse de un equipo que tenga el mismo sueño.

Loreanne García, cofundadora de Kavak, el primer unicornio mexicano, destacó que para Kavak el propósito de la empresa y pensar en grande fue lo que los llevó a convertirse en una de las startups más importantes del país y de América Latina. También resaltó la importancia que tienen empresas como la suya para transformar el ecosistema del emprendimiento en México y lograr que cada vez más visionarios cumplan la meta de consolidar sus empresas.

Con respecto a las limitantes que existen para lograr lo anterior, tanto Pablo Gómez, cofundador del Exchange de criptomonedas Bitso, como Daniel Undurraga, fundador de Cornershop, destacaron el tema regulatorio y la necesidad de que de la ley de competencia económica sea más ágil y camine hacia los estándares europeos, donde un trámite puede durar 12 días, en contraste con los 18 meses que implicó el proceso de evaluación y resolución de la fusión Uber-Cornershop en México.

Trabajar en una startup o en un corporativo, los “aventureros” responden

En el evento también se dieron cita los directivos de grandes empresas y en el panel “La aventura de trabajar con emprendedores ”, versaron sobre su experiencia al trabajar con emprendedores y el rol que se desempeñan como directivos de estos proyectos.

La conversación fue moderada por Blanca Juana Gómez, dirección general de Expansión Publishing, quien previamente trabajó durante 5 años como directora general de MMK, empresa fundada por la emprendedora Endeavor Martha Debayle.

La charla contó con la participación de Lucía Mecott, directora de Tecnología y Operaciones de BlueMessaging; Hernán Barbieri, director global de operaciones de Kidzania; Daniel García, Jefa de Producto de Synapbox y Paola Fernández, Jefa de Gente de Jüsto. Todos coincidieron en que la diferencia entre trabajar en una startup o en una gran corporación, estriba en el tipo de desarrollo que busca cada profesional.

Resaltaron que si alguien busca un desarrollo exponencial, en lugar de uno lineal, entonces le conviene trabajar para una startup. Y es que, en estas empresas, por ejemplo, cada día se toman decisiones que pueden ser determinantes en el desarrollo del negocio y es más fácil implementar ideas propias al aprender en un contexto de prueba y error.

Además, para estos colaboradores, trabajar al lado de un emprendedor les llevó a descubrir que ellos mismos también estaban convirtiéndose -con el trabajo diario- en emprendedores.

Asimismo, expresaron que si bien el emprendedor es el visionario y el que pone los

objetivos que causarán una disrupción en el mercado, es el equipo en su conjunto el que aterriza todas las ideas y hacen que las cosas sucedan.