MEJOREDU publica los resultados de la encuesta sobre acoso escolar entre estudiantes de educación secundaria.
Identifican la prevalencia de diferentes tipos de acoso en secundaria, tanto en contextos presenciales como virtuales, los principales grupos de riesgo y diversos factores
La Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu) publicó en su página web el documento Encuesta sobre acoso escolar entre estudiantes de educación secundaria. Prevalencia, grupos de riesgo y factores asociados, el cual aporta información relevante sobre este tema e identifica la presencia de diferentes tipos de acoso en este nivel educativo, tanto en contextos presenciales como virtuales, para plantear rutas de seguimiento y atención.
De acuerdo con estudios previos realizados por Mejoredu, se identificó que la educación secundaria es el nivel educativo —dentro del Sistema Educativo Nacional— donde se presentan las mayores expresiones de acoso entre estudiantes, por lo que se decidió desarrollar esta encuesta para valorar la magnitud del problema en este nivel educativo, además de dimensionar los tipos de agresiones que se ejercen, los grupos de riesgo y los factores asociados al contexto y al comportamiento de las y los estudiantes.
Con este trabajo Mejoredu asume su responsabilidad de estudiar con detalle el fenómeno de las expresiones de violencia escolar para comprenderla, a fin de favorecer la definición de acciones para su eliminación tal como está establecido en la Ley General de Educación y, al mismo tiempo, se propone contribuir tanto a los planteamientos de la Nueva Escuela Mexicana descritos en el Plan de Estudios para la Educación preescolar, primaria y secundaria 2022, como a la política nacional con perspectiva de género para mantener a las escuelas libres de violencia y acoso.
Esta Encuesta , en la que participaron 495 escuelas, 64 mil 173 estudiantes, 6 mil 429 docentes y personal de apoyo, así como 572 directores de escuela de todas las entidades del país, también explora algunas variables asociadas al acoso escolar (ejercido y recibido) tanto del contexto escolar, como de valores y pautas de conducta de los estudiantes como la desconexión moral, la influencia de la compasión, la disposición a desobedecer la ley, la tolerancia a la violencia o el clima escolar de secundaria y que pueden ser de gran utilidad para afianzar las acciones relativas a la educación socioemocional de las y los estudiantes.
Sobre los grupos de riesgo, el estudio reporta que el acoso es más frecuente entre los estudiantes de secundarias privadas, seguido de los de secundarias técnicas. Las escuelas secundarias generales registran un menor nivel de acoso. La prevalencia de este fenómeno aumenta según el grado escolar, de forma que está más presente en tercer año. Otro hallazgo señala que los estudiantes que reportan experimentar mayor acoso son las y los adolescentes no heterosexuales, con discapacidad, menor nivel económico, quienes hablan alguna lengua indígena y las mujeres.
Con respecto al acoso y ciberacoso, recibido y ejercido, el informe muestra que las agresiones más frecuentes que reciben las y los estudiantes son insultos, burlas, rumores, apodos, amenazas, romper o estropear la ropa o pertenencias.
Los estudiantes encuestados recomiendan que las y los maestros intervengan cuando observan o les reportan una situación de acoso; realizar pláticas y talleres sobre este fenómeno y sus consecuencias; elaboración y aplicación de un reglamento escolar y que haya servicio de psicología. Los docentes, personal de apoyo y directivos consideraron necesaria mayor capacitación sobre este tema, y recibir pláticas y talleres. Lo mismo para padres y madres de familia.
Con base en los resultados obtenidos, Mejoredu recomienda: involucrar a toda la comunidad escolar en las acciones que se lleven a cabo para acabar con toda manifestación de violencia; promover entre los estudiantes experiencias que impulsen el reconocimiento, respeto e inclusión de la diversidad; impulsar que personal educativo, administrativo, padres y madres de familia asuman su responsabilidad en la prevención y atención de este fenómeno; establecer climas escolares positivos que tengan normas de convivencia claras que respeten la dignidad e identidad de los integrantes de la comunidad escolar y que contengan medidas de seguridad para todas y todos, las cuales deben ser supervisadas por el personal educativo.
Finalmente, como parte de la formación inicial y continua de las y los docentes, se recomienda fomentar el desarrollo de capacidades teórico-prácticas sobre el acoso escolar y sus características particulares, así como enfatizar los factores que la investigación especializada ha identificado como las causas de esta problemática.