Se desbordan ríos en Michoacán por desfogue de presas
La fuerza del agua del río Balsas destruyó carreteras, se llevó puentes y dejó damnificados a los habitantes del poblado de Guacamayas, en Lázaro Cárdenas.
Tijuana, 30 de Septiembre. - El desbordamiento de las presas hidroeléctricas La Villita e Infiernillo provocó el crecimiento de al menos tres ríos en la región Costa-Sierra de Michoacán. Esto ocasionó daños en carreteras y la destrucción de 40 pequeños restaurantes ubicados a la orilla del Río Balsas.
La descarga de la presa La Villita, situada entre los estados de Michoacán y Guerrero, incrementó el caudal del Río Balsas, que terminó desbordándose en la zona de Guacamayas, en el municipio de Lázaro Cárdenas.
El aumento del agua destruyó 49 enramadas, donde se vendía comida y se realizaban actividades recreativas. Los dueños de estos negocios, algunos con hasta 30 años de antigüedad, lo perdieron todo.
Entre los afectados está Don Raymundo García, quien por 30 años administraba la "Enramada Bricia", famosa por su pescado frito. A sus 62 años, Raymundo ha perdido su única fuente de ingresos. Desesperado, pide ayuda a la presidenta electa Claudia Sheinbaum, a quien apoyó en las elecciones, esperando que ella pueda brindarle auxilio.
El desfogue preventivo de La Villita comenzó el viernes por la tarde y, según las autoridades, continuará durante el fin de semana. Hasta el momento no se han reportado víctimas mortales. La alerta se mantiene tras el paso del fenómeno meteorológico John, que tras causar daños en Guerrero y Oaxaca, se debilitó en la sierra de Michoacán.
En la región costera de Michoacán las lluvias persisten de manera intermitente, y el personal de Protección Civil vigila ríos y arroyos durante todo el día.
En La Huacana, el terreno reblandecido por las lluvias provocó el colapso de un puente vehicular en la carretera libre Cuatro Caminos-Lázaro Cárdenas, a la altura de la comunidad de El Cupuncillo. El gobierno estatal ha solicitado la declaración de desastre natural, ya que los municipios más afectados, como Huetamo, San Lucas, Apatzingán y Lázaro Cárdenas, entre otros, han quedado incomunicados y necesitan víveres con urgencia.