Importante cuidar los niveles de triglicéridos, señalan especialistas del IMSS
Pueden provocar problemas cerebrales y de corazón.
Por: José JIMÉNEZ DÍAZ / El MEXICANO | 05/29/2019
TECATE.- El consumo excesivo de calorías, medicamentos y la edad son algunos factores que causan los altos niveles de grasa en la sangre, lo que representa el riesgo de sufrir un infarto o derrame cerebral.
Xóchitl Valenzuela González, médica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) explicó que los triglicéridos son la grasa presente en el torrente sanguíneo y el tejido adiposo; al comer se digieren las grasas y se liberan triglicéridos a la sangre, luego éstos son trasportados a todo el organismo para dar energía o se almacenan como grasa.
El hígado, indicó, también produce triglicéridos y cambia algunos a colesterol.
Enfermedades como diabetes, obesidad, insuficiencia renal y alcoholismo pueden causar también su incremento.
En cuanto a los altos niveles de éstos en el organismo, detalló que pueden ser por diferentes razones como el exceso de peso, poca proteína en los alimentos, un alto consumo de carbohidratos, enfermedades como la diabetes, hipotiroidismo y renales, aunque también prevalece el factor genético.
En ese sentido, Valenzuela González advirtió que en algunos pacientes los altos niveles de no ocasionan absolutamente ningún síntoma, aunque para otros sí hay cambios sustanciales como aumento de la grasa del abdomen, cansancio, dolores musculares (fibromialgia), caída de cabello, acné, ansiedad por comer carbohidratos en las tardes, ronquidos al dormir (apnea del sueño), colesterol, hígado graso y verrugas en cuello y axilas.
Por ello, advirtió, es importante mantener un nivel adecuado de triglicéridos; en primer término es que si es muy elevado, puede causar una pancreatitis aguda que somete a un riesgo de morir en poco tiempo si existen complicaciones.
También son un factor de riesgo cardiovascular, por lo que aun manteniéndolos en límites adecuados, implican un riesgo lipídico residual o remanente, que es la posibilidad complementaria de sufrir una enfermedad cardiovascular.
Controlar la ingesta de carbohidratos, de azúcar (se puede sustituir por edulcorante artificial), perder peso corporal, disminuir el consumo de grasa total y saturada, evitar la mantequilla, natillas, helados de crema, lácteos enteros, carnes muy grasosas, ejercitarse regularmente, es benéfico ya que su aceite ayuda a reducir los niveles de triglicéridos.
Xóchitl Valenzuela González, médica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) explicó que los triglicéridos son la grasa presente en el torrente sanguíneo y el tejido adiposo; al comer se digieren las grasas y se liberan triglicéridos a la sangre, luego éstos son trasportados a todo el organismo para dar energía o se almacenan como grasa.
El hígado, indicó, también produce triglicéridos y cambia algunos a colesterol.
Enfermedades como diabetes, obesidad, insuficiencia renal y alcoholismo pueden causar también su incremento.
En cuanto a los altos niveles de éstos en el organismo, detalló que pueden ser por diferentes razones como el exceso de peso, poca proteína en los alimentos, un alto consumo de carbohidratos, enfermedades como la diabetes, hipotiroidismo y renales, aunque también prevalece el factor genético.
En ese sentido, Valenzuela González advirtió que en algunos pacientes los altos niveles de no ocasionan absolutamente ningún síntoma, aunque para otros sí hay cambios sustanciales como aumento de la grasa del abdomen, cansancio, dolores musculares (fibromialgia), caída de cabello, acné, ansiedad por comer carbohidratos en las tardes, ronquidos al dormir (apnea del sueño), colesterol, hígado graso y verrugas en cuello y axilas.
Por ello, advirtió, es importante mantener un nivel adecuado de triglicéridos; en primer término es que si es muy elevado, puede causar una pancreatitis aguda que somete a un riesgo de morir en poco tiempo si existen complicaciones.
También son un factor de riesgo cardiovascular, por lo que aun manteniéndolos en límites adecuados, implican un riesgo lipídico residual o remanente, que es la posibilidad complementaria de sufrir una enfermedad cardiovascular.
Controlar la ingesta de carbohidratos, de azúcar (se puede sustituir por edulcorante artificial), perder peso corporal, disminuir el consumo de grasa total y saturada, evitar la mantequilla, natillas, helados de crema, lácteos enteros, carnes muy grasosas, ejercitarse regularmente, es benéfico ya que su aceite ayuda a reducir los niveles de triglicéridos.