Agentes de ICE persiguen a ciudadana estadounidense hasta su casa
Una mujer de 22 años fue interceptada en la calle y seguida hasta su hogar por agentes federales
Nueva Orleans. EE.UE. - Una nueva polémica rodea a ICE luego de que se difundiera un video que muestra a agentes migratorios persiguiendo a una ciudadana estadounidense hasta la puerta de su casa en el suburbio de Marrero, cercano a Nueva Orleans. La atropellada escena ocurrió mientras la joven caminaba de regreso de hacer compras en un supermercado.
La víctima, identificada como Jacelynn, de 22 años, relató que, cuando vestía ropa casual y regresaba a su domicilio a pie, una camioneta sin identificación se detuvo junto a ella. De ella descendieron dos agentes encapuchados, quienes le ordenaron detenerse. Según su testimonio, creyó en un principio que se trataba de un transporte privado, pero al escuchar "Stop" y ver las armas, comenzó a correr.
En su huida, la cámara de seguridad de su vivienda captó el momento en que los agentes la siguieron hasta su puerta mientras ella gritaba: "¡Soy ciudadana estadounidense! ¡No estoy haciendo nada malo!", suplicando que la dejaran entrar.
Pese a que en la grabación se observa que la mujer no llevaba objetos ni documentos visibles que justificaran una detención, los agentes mantuvieron una actitud hostil. Según relatos, al llegar al umbral de su hogar, Jacelynn frenó al ver que sus vecinos salían, lo que complicó el intento de detención. Finalmente, los agentes se retiraron, sin realizar una detención formal, aparentemente tras concluir que no coincidía con la persona que buscaban.
Este episodio ocurrió en el marco de una ofensiva migratoria renovada del gobierno federal, caracterizada por redadas masivas y operativos agresivos, lo que ha generado críticas por parte de organizaciones de derechos civiles, legisladores locales y miembros de la comunidad latinoamericana en Estados Unidos.
Vecinos de la zona expresaron su consternación, asegurando que en varias ocasiones han visto patrullajes intensificados y presencia de agentes federales en barrios residenciales, incluso en horarios nocturnos. Para ellos, el incidente confirmó el temor de que las operaciones de inmigración ya no distinguen entre personas con permiso legal, ciudadanos o residentes.
El caso ha reabierto el debate sobre los límites de las facultades de ICE, la protección de ciudadanos estadounidenses ante operativos migratorios y el respeto al debido proceso. Hasta el momento, la dependencia no ha emitido un comunicado oficial sobre esta persecución, y se desconoce si habrá alguna investigación interna.
