Jueza frena veto de Trump contra Harvard; estudiantes extranjeros podrán seguir ingresando
La medida queda en pausa hasta la audiencia del 29 de mayo.

Tijuana, 23 de Mayo. - Una jueza federal en Massachusetts suspendió este jueves la revocación impuesta por el gobierno de Donald Trump que impedía a la Universidad de Harvard admitir estudiantes internacionales, medida que había generado una ola de críticas en el ámbito académico.
La decisión judicial responde a una demanda presentada por la propia universidad, que calificó la medida como inconstitucional y perjudicial para su misión educativa. El veto afectaba al programa SEVIS, esencial para matricular alumnos con visado F y J, y ponía en riesgo el ingreso de estudiantes extranjeros para el ciclo 2025-2026.
Harvard argumentó que la decisión del gobierno era una represalia política por sus políticas internas y su postura crítica frente a algunas decisiones federales. Según la universidad, el veto representaba una amenaza directa a la libertad académica y a su autonomía institucional.
Actualmente, más del 25% del alumnado de Harvard proviene del extranjero. Su exclusión, advirtió la universidad, no solo afectaría el dinamismo académico, sino también su estabilidad financiera.
El Departamento de Seguridad Nacional, encabezado por Kristi Noem, justificó la revocación alegando vínculos con ideologías contrarias a los intereses nacionales, incluyendo presuntos actos de antisemitismo y nexos con el gobierno chino. También congeló más de 2.000 millones de dólares en subvenciones dirigidas a Harvard y deportó a un investigador de su Facultad de Medicina.
La suspensión se mantendrá al menos hasta una audiencia preliminar programada para el 29 de mayo. Mientras tanto, Harvard podrá mantener su operación habitual con estudiantes internacionales.
China, que cuenta con la mayor proporción de estudiantes internacionales en Harvard, condenó la medida por considerar que politiza la educación superior. Profesores y alumnos calificaron el veto como un ataque sin precedentes a la libertad académica en Estados Unidos.
El caso, seguido de cerca por universidades y gobiernos extranjeros, podría marcar un precedente clave en el debate sobre inmigración educativa y autonomía universitaria en EE.UU.



