Iraís Reyes condena impuesto del 8 % a videojuegos y plantea defensa de la industria digital

CDMX, México. - En una sesión reciente en la Cámara de Diputados, la legisladora Iraís Reyes, de Movimiento Ciudadano, se lanzó con firmeza contra la propuesta de imponer un impuesto del 8 % a los videojuegos con contenido violento, calificándola de "absurda" y advirtiendo que podría criminalizar la cultura lúdica en México.

Durante su intervención, Reyes protagonizó uno de los momentos más recordados del debate: subió al atril con un control de Xbox en la mano y desplegó un cartel que decía "Game over a la censura. No a los impuestos absurdos". Con tono directo, afirmó que "nadie se convierte en delincuente por jugar", mencionando títulos como The Last of Us, Pokémon y Mortal Kombat como ejemplos de ficción que no generan criminales.

La diputada cuestionó también los argumentos del gobierno al plantear que el impuesto busca atender la salud mental o prevenir la violencia juvenil, señalando que esas excusas suenan más a medida recaudatoria que política pública efectiva. Sostuvo que mientras aumenta el gasto en impuestos para videojuegos, permanecen impunes los verdaderos agentes de violencia en el país.

Durante la sesión, su intervención despertó adhesiones y críticas, incluso provocando cruces verbales con otros legisladores que respaldan el gravamen, quienes defendían la propuesta como parte de los llamados "impuestos saludables" incluidos en el paquete fiscal 2026. Sin embargo, el discurso de Reyes se viralizó rápidamente entre comunidades gamer y usuarios de redes, quienes interpretaron su postura como una defensa clara de la industria digital y del entretenimiento.

Con esta intervención, la diputada de MC amplió el debate más allá de lo económico hacia la libertad cultural, la estigmatización de jóvenes jugadores y el papel del Estado al querer regular lo que muchos consideran una forma legítima de expresión. Su participación podría fortalecer la resistencia de legisladores opositores para exigir modificaciones o la eliminación del impuesto antes de que la propuesta avance en el Congreso.